“Reconcilia España”, ciudadanos de todo el país piden ser escuchados y reclaman un nuevo pacto por el cuidado del medioambiente

El Foro Reconcilia España, impulsado por Legados, ha reunido a voces del territorio que hasta ahora no habían sido invitadas a los grandes debates sobre el clima y el futuro del país, y abre una hoja de ruta con manifiesto, conclusiones y más espacios de debate.

Participaron, entre otros, representantes de los sectores de la ganadería, pesca, apicultura, de pequeños municipios y proyectos sostenibles.

Madrid, 01 de diciembre de 2025 —España tiene voces que nunca habían sido invitadas antes al debate sobre el clima. Por ello, Legados, organización dedicada a fortalecer la participación de la sociedad civil en la construcción de soluciones para un entorno natural en constante cambio, ha celebrado en Casa América (Madrid) el foro Reconcilia España, un espacio de diálogo que reunió a representantes públicos, empresarios, expertos y ciudadanos con el objetivo de acercar las realidades locales al debate político y social sobre el medioambiente. 

Escuchar al territorio para construir soluciones reales

Este encuentro surge como respuesta a un contexto marcado por fenómenos extremos —incendios cada vez más virulentos, la DANA, temporales como Filomena, sequías recurrentes e inundaciones más frecuentes— que afectan tanto a entornos urbanos como rurales, y nace de la necesidad de mirar al futuro entendiendo primero qué está ocurriendo hoy en el país y las muchas realidades que conviven en un territorio diverso, pero unido por desafíos comunes. Hoy, más de 7,5 millones de personas viven en la España rural, un 15,5% de la población nacional, lo que representa a una parte importante del país cuya voz urge ser escuchada.*1

El acto, que cuenta con la colaboración de Alianza Rural, Fundación Independiente y otras entidades aliadas que representan la pluralidad de los territorios españoles, estuvo estructurado en cuatro partes —Conocer, Conservar, Construir y Hacerlo posible— que representan el camino hacia una nueva forma de entender el país. Ese llamado tiene base en una realidad preocupante: en 2023 España contaba con solo 784.141 explotaciones agrícolas, un 12,4 % menos que en 2020, y la superficie agrícola útil descendió también un 1,6 %.*2

Entre las voces institucionales ha destacado la participación de Ester Muñoz, portavoz del Grupo Popular en el Congreso de los Diputados, quien desde el atril ha subrayado la importancia de que la política escuche directamente a quienes sostienen el territorio y transforme sus demandas en decisiones útiles y realistas. Muñoz destacó que foros como este permiten conocer de primera mano el impacto de las políticas públicas en la vida de las familias y desde diferentes sectores de la sociedad. 

Conservación: legado y responsabilidad

“Vivimos desconectados de la naturaleza y del mundo rural que son nuestro cordón umbilical con la identidad y la vida. El 99,9% de todas las especies que han existido se han extinguido y hoy solo nos acompaña el 1%, una realidad que debería recordarnos nuestra fragilidad. Reconciliar exige comunicación clara, diálogo con el territorio y soluciones de abajo arriba. No se trata de aleccionar, sino de ofrecer a las personas, especialmente a los jóvenes, la oportunidad de reencontrarse con la naturaleza como un espacio de bienestar y sentido.”, ha acentuado  Odile Rodríguez de la Fuente.

“La naturaleza también es memoria. Mi padre me enseñó que la conservación es una forma de amor. La naturaleza es un hilo que teje identidad, cultura y futuro. Por lo tanto, conservar no es detener el tiempo, es honrar lo que nos sostiene. No podemos excluir a quienes viven la naturaleza cada día”, añade Odile.

Asimismo, María Rey, presidenta de la Asociación de la Prensa de Madrid y conductora del evento, ha charlado con Iván Espinosa de los Monteros, presidente de Atenea, que puso el foco en el papel de la sociedad civil y la necesidad de construir marcos estables que reduzcan trabas, aporten certidumbre y permitan que el territorio prospere. Juntos abordaron cómo reforzar la colaboración entre instituciones, organizaciones y ciudadanía para avanzar hacia soluciones que respondan a las necesidades reales del país.  

“La naturaleza también es memoria. Mi padre me enseñó que la conservación es una forma de amor. La naturaleza es un hilo que teje identidad, cultura y futuro. Por lo tanto, conservar no es detener el tiempo, es honrar lo que nos sostiene. No podemos excluir a quienes viven la naturaleza cada día”, añade Odile.

Las voces del territorio y sus propuestas

Algunas de las otras voces conectadas con los territorios de nuestro país que participaron fueron Álvaro Vara, alcalde de Gajanejos, un pequeño municipio de 50 habitantes, quien ha reflexionado sobre los desafíos de preservar el entorno en la España rural. En suma, José Carlos Caballero, viticultor, describió de qué manera los cambios climáticos y las políticas ambientales están afectando al cultivo de la vid. 

Por su parte, Lucía Pardal, técnica ambiental en A Bola, ha presentado el proyecto del bosque comestible, un modelo de sostenibilidad que busca integrar comunidad y naturaleza. José Luis Belmonte, representante de la Iniciativa Legislativa Popular sobre una nueva Ley de Aguas, ha analizado cómo la participación ciudadana puede contribuir a mejorar la gestión del agua frente a fenómenos de sequía e inundaciones. 

Marisa Rodríguez, Presidenta de Afammer en la Comunidad en Madrid señalo cómo está afectando el abandono de nuestros pueblos al cuidado de nuestro patrimonio natural y nos compartió acciones, desde la sociedad civil, que pueden llevarse a cabo para revertir este abandono y proponer alternativas.

Finalmente, Tatiana Sánchez, ganadera de Bravo para Guadalest, puso de relieve los retos que enfrentan los productores rurales ante el deterioro del entorno y las políticas vigentes. 

Jessica Franco, apicultora de Carrascosa de Henares nos mostró el rol clave de la producción de miel y nos habló del apoyo económico necesario para poder hacer su trabajo para poder lidiar con problemas como plagas, por ejemplo, la avispa asiática, o los productos químicos.

En el bloque de ciudadanos, el público aportó una muestra representativa de las demandas de la población rural y urbana, que coincidieron en reclamar menos burocracia, más apoyo efectivo y una escucha activa de quienes habitan los territorios. Muchos asistentes han subrayado que viven y trabajan en primera línea del territorio y que conocen de primera mano qué soluciones funcionan y cuáles no. 

También defendieron que la tradición no es una reliquia del pasado, sino una herramienta de supervivencia, y recordaron que, si el territorio se deteriora, las consecuencias alcanzan a toda la sociedad. “No pedimos privilegios; pedimos ser escuchados”, expresaron distintos participantes.

Pere Gotanegra, Director de Pescadores de Roses (Girona), nos habló de cómo las regulaciones buscan proteger el mar y su biodiversidad, pero, desde su sector, hay una percepción de que están ahogando al sector.

Conclusiones y hoja de ruta

Las conclusiones del foro coincidieron en que la política debe escuchar antes de legislar, que la conservación del entorno no es una ideología sino un compromiso compartido y que las ideas expuestas en espacios como este deben llegar al Congreso para traducirse en políticas públicas. También se remarcó la necesidad de integrar tradición y sostenibilidad en las estrategias ambientales y la importancia de reconectar con el territorio para comprender mejor sus necesidades.

“La hoja de ruta que hemos comenzado a construir hoy demuestra que las soluciones solo pueden nacer del territorio, del conocimiento y de la escucha real. Reconcilia España es un espacio independiente, al servicio de la ciudadanía, para poner estos legados a disposición de todos y avanzar hacia un país más justo y en armonía con sus territorios”, ha concluido Javier Dorado.

Álbum del encuentro aquí.